*El siguiente artículo es un extracto de nuestro Boletín Premium | 28 enero, 2023
El testimonio de “María”, exfuncionaria del Poder Judicial: “El FSLN manda a vigilar en las iglesias”
“María” dejó de ir a misa y participar en actividades religiosas para evitar represalias por “la vigilancia extrema” de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que en 2022 incrementó contra los trabajadores del Estado.
A finales del año, la entonces funcionaria del Poder Judicial por casi una década no soportó más, aprovechó unas vacaciones a Estados Unidos y abandonó su puesto de trabajo, renunciando a sus prestaciones laborales. Esa era la única forma de hacerlo, afirma.
Ahora, en proceso de asilo político, denuncia en entrevista con CONFIDENCIAL y Esta Semana las presiones, vigilancia, amenazas y temores que sufren los servidores públicos que –como ella– no comulgan con el abuso de poder y las violaciones del orteguismo. La invasión a su fe católica fue el detonante para decidir su salida.
“Hay personas en cada iglesia que se sientan en las banquitas, en la parte de atrás, o en las gradas de las iglesias, a ver quién entra de los trabajadores, para así denunciarnos”,
revela “María”.
La exfuncionaria judicial describe el control y la presión impuesta por el Frente Sandinista. Cada vez más los obligan a participar en actividades partidarias y talleres de adoctrinamiento político, están pendientes de sus comentarios, no tienen permiso de movilizarse y tampoco pueden expresar sus inconformidades.
El apoyo de los trabajadores al Frente Sandinista es “bajo”, confirma, y muchos tienen los “ojos bien abiertos” y están en desacuerdo con la vigilancia política, la persecución contra la Iglesia, la situación de los presos políticos y están agobiados por la crisis económica y los salarios que no alcanzan.
El pasado 20 de enero, el régimen anunció como “una buena noticia” el ajuste salarial del 5% para los trabajadores estatales, que será aplicado a partir de febrero. Sin embargo, en un reportaje de CONFIDENCIAL, publicado esta semana, conversamos con un médico y dos oficinistas del Estado que describen cómo lidian con la carestía de la vida y califican el ajuste como “una burla”.
“Nuestro salario no da para nada, con costo tal vez la canasta básica, y a veces ni siquiera para eso”,
lamenta “María”.
Como católica, la exfuncionaria judicial critica la arremetida del régimen orteguista contra la Iglesia, que ha encarcelado a once sacerdotes, entre ellos a monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa. Fue un “detonante fuerte para muchos (trabajadores del Estado)”, dice. El Gobierno –opina– está “metiéndose más cuchillos actuando de esa forma”.
“María” también cuestiona las irregularidades y violaciones en los juicios contra los reos de conciencia. Confirma que “fabrican pruebas” contra los presos políticos e imponen a trabajadores de las instituciones y policías como testigos.
La entrevista con “María” se transmitió el pasado domingo 29 de enero, a las 8:00 p.m. en Esta Semana, a través de nuestro canal en YouTube Confidencial Nica.
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REPORTAJE DE LA SEMANA
Familias sortean regreso a clases en medio del alza imparable del costo de la vida: “No alcanza”
En CONFIDENCIAL, también conversamos con cuatro madres nicaragüenses que relatan sus esfuerzos para enviar a sus hijos a clase en medio de la debacle económica del país, sobre la que la encuesta más reciente de CID Gallup comenta: “Los alimentos que suelen se parte de dieta diaria ya tienen precios prohibitivos”.
La pobreza en que vive alrededor de la mitad de las familias, agravada por el alza imparable en el costo de la vida, empuja a la población –principalmente mujeres a cargo del hogar– a hacer los esfuerzos más grandes para alimentar a sus hijos y nietos, con el agravante de enero, cuando hay que desembolsar miles de córdobas más, para que los niños tengan lo que necesitan para regresar a clases.
El 68% de los nicaragüenses considera que el costo de la vida ha subido “algo” o “mucho” durante los últimos meses, según los datos de una encuesta de la firma CID Gallup, hecha en la primera quincena de enero. Así, las estadísticas corroboran el drama que viven miles de familias en todo el país para alimentar a los suyos, en un contexto en el que también el 57% opina que la economía familiar está “peor”.
En diciembre de 2021, el costo de la canasta básica de 53 productos se calculaba en 16 255 córdobas (457.99 dólares, al cambio promedio de ese mismo mes), según el gubernamental Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide). Un año después, en diciembre de 2022, su costo se había elevado en 16.8% hasta los 18 981 córdobas, o 524.31 dólares, con base en el tipo de cambio oficial que dicta el Banco Central de Nicaragua.
“La percepción del costo de vida está relacionada con la estimación del rumbo del país: si el país va por el rumbo correcto se tiene una condición económica mejor. No obstante lo anterior, alrededor de siete de cada diez informantes –en especial mujeres– considera que los precios de los artículos básicos del hogar han aumentado mucho”, señala la CID Gallup.
Esta semana, en nuestro sitio web, también publicamos los resultados de la encuesta que sostienen que los nicaragüenses evalúan “cada vez peor” a Ortega. La mala relación con Estados Unidos, el repunte de la corrupción y la falta de empleo son las principales preocupaciones de los nicaragüenses.
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HISTORIETA SEMANAL
De lectura obligada
En la Historieta Semanal, PxMolina aborda la prohibición del derecho a la lectura y escritura en El Chipote, que te contamos en uno de nuestros reportajes de la semana. ¿Cómo sería el intercambio entre un policía y un familiar?
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